Cuando llegas a las cien mil visitas en tu blog, ¿pasa algo?

Cuando llegas a las cien mil visitas en tu blog hace ilusión ver tanta cifra, piensas que cuatro años y medio atrás te hubiese parecido una broma. Hace menos gracia recibir correos de gente que casi te amenaza para que le des una dirección a la que mandar su maravilloso libro para que, por supuesto, lo reseñes. Sí, con ese mail-bomba, a ti te voy a dar, precisamente, mi dirección. Sigue dando respeto tener que contestar a otros "gracias por tu oferta, pero no me mandes nada, no leo por compromiso", esperando que alguien al otro lado de la pantalla lo entienda. Pasa que puedes saber cuántos libros has leído en ese tiempo (doscientos treinta) y que ya le puedes dar vidilla a la pila de libros de la mesita de noche, maja. Pasa que piensas que jamás hubieses conocido en persona a Miquel, por ejemplo, si no hubieras dado nunca a la tecla de "Publicar blog" -habría sido una pérdida enorme, porque además de ser un bendito, a él le debo la lectura de "Mientras agonizo"-  y que tienes ganas, ya puestos, de conocer en persona a Maca @mcr600 (calculo que unas noventa mil visitas tienen que ser de ella, porque mi madre no toca un ordenador) y pasa que sigues sorprendida de que a alguien pueda interesarle tu opinión sobre un libro. Por lo demás, no pasa nada. 

(Muchas gracias a tod@s.)